Turistas ven a un esquiador en la ladera de la montaña y se dan cuenta de que lo persiguen

Para el esquiador inexperto, es difícil creer que algo malo pueda suceder en las pintorescas laderas del monte St. Helens. Pero esos árboles frondosos y la escarpada ladera de la montaña se vuelven peor una vez que cae la noche. Y mientras generaciones de esquiadores y montañistas aprendieron por las malas, el peligro real que rodea al monte St. Helens acecha en sus profundidades más oscuras: incluso la luz de la luna apenas llega.

"Desconcertado"

Solo había una palabra para describir cómo se sintió el montañero Bob Lee el día que se fue a explorar la naturaleza que rodea al monte St. Helens: “desconcertado”. Viniendo de un miembro del exclusivo Alpine Club y futuro líder de una expedición al Himalaya, esa palabra era muy importante.

Búsqueda y rescate de montaña

La Unidad de Búsqueda y Rescate de Seattle Mountain estaba concluyendo una de sus investigaciones más confusas y estimulantes hasta la fecha. Todo lo que tenían para continuar era la historia de un grupo de amigos, que habían visto algo y perdido a alguien, de una manera que nunca entenderían.

Buscando a Jim Carter

Buscaban a un hombre llamado Jim Carter, que había llevado a su grupo de 20 escaladores al monte St. Helens, solo para desaparecer ante sus propios ojos. La historia del grupo fue extraña, especialmente considerando las impresionantes habilidades de Carter.

Esquiador experimentado

A los 32 años, Jim Carter era un esquiador, escalador y montañero experimentado que sabía lo peligrosa que podía ser la naturaleza. Cuando se ofreció a echar una foto de su grupo de escalada mientras esquiaban montaña abajo desde 2,500 metros, nadie se mostró preocupado.